miércoles, 30 de mayo de 2018

¿Asimetría de amigdalas o cáncer?


En la práctica pediátrica diaria, es común encontrar en el niño una amígdala más grande que la otra, y lo consideramos como un hallazgo normal, porque casi siempre es así. Nunca o casi nunca pensamos en cáncer de amígdala, porque en el niño, este cáncer es muy raro.

Con el objetivo de encontrar una relación entre el cáncer de amígdala y el agrandamiento unilateral de estas en la edad pediátrica, Adil et als. Publicaron un estudio tomando como base de datos “Surveillance Epidemiology End Results, SEER” y 18 bases de datos más del cáncer que abarcó los  años desde 1973 a 2014. También revisaron su propia experiencia institucional de casos de hipertrofia o agrandamiento de amígdala unilateral y la ocurrencia de cáncer infantil por más de 4 años. Registraron una incidencia de malignidad de 0.021/100,000 por año, siendo el linfoma no Hodgkin el más común en su estudio. Coincidiendo con la literatura mundial que reporta alrededor de un 2% de malignidad en los niños con agrandamiento unilateral de amígdalas.

Las amígdalas son parte de nuestro sistema de defensas, están formadas por tejido linfático, y su función es, atrapar los gérmenes y bacterias que pudieran entrar a nuestro cuerpo a través de la boca y nariz. Si ambas amigdalas se infectan,  se agrandan, y se acompañan de síntomas como fiebre, mal estado general e inflamación de los ganglios del cuello. Pero, cuando es solo una de ellas la que se agranda y si además aparece inflamación de los ganglios del cuello del mismo lado, debemos pensar en la posibilidad de una malignidad, que diagnosticada y tratada a tiempo, en la mayoría de los casos es curable.

En la inmensa mayoría de los niños, la asimetría de las amígdalas es un hallazgo benigno. Sin embargo, la posibilidad de un tumor maligno debe ser considerada si en la exploración física nos llama la atención que una de ellas es mucho más grande que la otra. Por esto y más, la inspección de la garganta en el examen físico y rutinario del niño es obligatoria.

REFERENCIA: “Asymetric Tonsils or Tonsillar Cancer?” Paul G. Fisher. The Journal of Pediatrics, june/2018, Volume 197, pages 3-4/Previous.

Dr. Marcos Díaz Guillén
pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana

miércoles, 9 de mayo de 2018

Vacunar a la embarazada: una estrategia eficaz


Las vacunas han hecho desaparecer o minimizado enfermedades que ya hemos olvidado en nuestra práctica médica: Viruela, poliomietlitis, epiglotitis etc. Refiriéndose a las vacunas, la OMS afirma: “A excepción del agua limpia, ningún otro factor, ni siquiera los antibióticos, ha ejercido un efecto tan importante en la reducción de la mortalidad…….”.

Es un hecho demostrado, que las vacunas aplicadas a la mujer embarazada no solamente la protegen a ella, sino también a su hijo. Desde que se comenzó a vacunar contra el tétanos a la mujer embarazada, comenzó a disminuir la incidencia de tétanos neonatal hasta casi desaparecer. Hubo resistencia entonces, como existe hoy en algunos profesionales resistencia a vacunar contra otras enfermedades que no sean el tétanos.  

Desde los inicios del siglo XlX se observó que la vacunación en la mujer embarazada protegía a la madre y a su hijo. Y, recientemente, después de la pandemia de gripe o influenza del año 2009, se observó, que la vacunación en la mujer no solamente elevaba los títulos de anticuerpos específicos en ella, sino también en su bebé, otorgándole una protección hasta que éste comenzara a vacunarse.

La inmunoglobulina G (IgG), es el único anticuerpo que se transfiere activamente a través de la placenta desde la semana 13 del embarazo y que crece exponencialmente durante el tercer trimestre del mismo, y, cuya concentración en el recién nacido es similar o excede a la concentración de la madre. Esta IgG, es la que concede inmunidad pasiva al bebé en sus primeros 60 días que es cuando el niño comienza a ser vacunado.

Los expertos recomiendan que la mujer embarazada, sea vacunada contra difteria, tétano, tosferina y contra la influenza, para protegerla a ella y a su criatura, mientras se espera lleguen al mercado otras vacunas que incluyen: contra el Estreptococo del grupo B, contra el Virus Sincitial Respiratorio y contra el Citomegalovirus. Enfermedades graves que afectan al recién nacido y que pueden prevenirse vacunando a la madre. Porque el campo de la vacunación materna avanza rapidamente con fuertes evidencias de seguridad, protección y efectividad en la mujer embarazada y su hijo.

REFERENCIA: Vaccination in Pregnancy – Recent Developments. Jones, Christine, E; PhD et Cols. The Pediatric Infectious Disease Journal. 37(5): 465, May 2018.

Dr. Marcos Díaz Guillén
pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana




miércoles, 2 de mayo de 2018

Pachamama









La ONU reconoce que la tierra y sus ecosistemas son el hogar de la humanidad. Sin embargo, el hombre moderno no lo ha entendido todavía. Desde el año 1970, el 22 de abril es el día internacional de la tierra, declarado, con la intención de crear una conciencia común sobre los problemas medio ambientales cuyos orígenes están en la gente: superpoblación, contaminación y lo poco que hacemos para la preservación de la biodiversidad.

Pacha Mama es un término en lengua quechua. Pacha se traduce como “tierra” y mama que equivale a
“madre”, por lo que pacha mama para ciertas etnias andinas significa “madre tierra”. Llama la atención, que para esta gente de vida tan elemental y primitiva, la tierra tenía y tiene la categoría y el respeto de algo casi divino. La tierra en su concepción no se refiere solo al planeta o a la tierra en sí, sino, que abarca mucho más. Es la comunión armoniosa del ser humano con la naturaleza, con la que interactúa permanentemente a través de sus rituales. Estos seres humanos entendieron, distinto al hombre actual, que la Pacha Mama nos protege, nos cuida y nos alimenta, por lo que debemos amarla, respetarla y cuidarla.

La deuda que tiene el hombre “civilizado” con el planeta por nuestros desafueros, la podemos resarcir: enseñando a nuestros niños esos valores. Que amar y respetar nuestro habitat, es amarnos y respetarnos a nosotros mismos. Esta tarea, debe comenzar en nuestras casas desde muy temprano apoyada por el colegio y la escuela. Es nuestro deber, que los niños aprendan sobre ecología. Inculcarles  lecturas sobre la fauna y la flora. Sobre el valor del agua y lo que significa para muchos niños y adultos que enferman y mueren a diario por lo difícil que les resulta acceder a ella. Que aprendan a cerrar las llaves de agua, a apagar las luces que no están usando, a gastar menos papel en sus tareas usando ambos lados de una misma hoja, a reciclar etc. Son acciones muy simples, que aprendidas desde muy temprano, formarán ciudadanos más considerados, compadecidos y felices. La madre tierra les agradecerá y les devolverá con creces.
Dr. Marcos Díaz Guillén
pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana