Para tranquilidad de algunos padres, les diré que el niño
que nace de parto vaginal (raro en este país), puede nacer con su cráneo
deformado por la presión que recibe la cabeza del bebé en el canal vaginal durante
la labor de parto, eso es normal y se corrige solo en poco tiempo. Y niños que han mantenido una misma
posición in útero por embarazos múltiples o por tortícolis congénita, también
podrían nacer con alguna deformidad.
Los pediatras pedimos a las madres que pongan a su bebé a
dormir en posición supina (boca arriba) para no favorecer la aparición del
Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
Que es la muerte inesperada de un niño sano y sin historia de morbilidad.
Una muerte que no podemos explicar ni siquiera con la autopsia y que es más
frecuente en los niños que duermen en posición prono (boca abajo). Dormir boca arriba puede producir con el
tiempo un aplastamiento (plagiocefalia) de la cabeza del niño en el área del
hueso occipital (occipucio). Que se puede corregir fácilmente y no debería ser
obstáculo para que el niño siga durmiendo boca arriba al menos hasta pasar el
tiempo más crítico que son sus primeros 8 meses de vida, aunque sabemos que el
SMSL tiene su mayor frecuencia entre los 4 y 6 meses.
¿Qué hacer?
. Permitir que el bebé mientras está despierto y bajo
supervisión pase el mayor tiempo en posición de lado o boca abajo.
. El pediatra o el fisiatra ensenarán a los padres unos
ejercicios y rotación de la cabeza, porque en muchos casos hay asociada una
contractura o tortícolis de los músculos del cuello que le impiden al niño
cambiar su cabeza se posición.
. Que la madre cambie con frecuencia la posición del bebé
en la cuna.
. En los casos leves y moderados en poco tiempo el bebé
habrá moldeado su cráneo espontáneamente.
¿Qué hacer en los casos severos?
En estos casos, la deformidad craneal amerita de ortesis
craneal, que es la colocación de un casco especial hecho a la medida, fabricado
con tecnología 3D para remodelar el cráneo que le permita al cerebro crecer
libremente, porque ¾ partes del desarrollo cerebral humano se produce en los
primeros dos años de vida. Dependiendo de la severidad de la deformidad y de la
edad, el casco remodelará el cráneo del niño en un tiempo que va entre los
cuatro y seis meses evitando daños estéticos, neurológicos y del desarrollo si
el aplastamiento cuando es severo no es corregido a tiempo.
Marcos Díaz Guillén
pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana.