jueves, 30 de mayo de 2019

Próxima pandemia de gripe, otros virus y enfermedad X


“El mundo sufrirá inevitablemente otra pandemia de gripe, y debe prepararse para la posible devastación que podría causar y no subestimar los riesgos” (OMS). Además de que existen otros diez patógenos, que desde el año 2018 esta organización ha identificado como amenazas y que debemos conocer:
-          Virus Nipah: transmitido al ganado por el murciélago y también a los humanos con una mortalidad del 40% al 70%.
-          Fiebre hemorrágica de Crimea: virus transmitido por garrapatas que puede producir brotes letales en los humanos.
-          Virus Ébola: transmitido por el murciélago frugívoro (de las frutas), que se puede transmitir de persona a persona con una mortalidad de un 50%.
-          Virus Marburgo: Pariente del Ébola, también lo transmite el murciélago con una mortalidad del 24% al 88%.
-          Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) enfermedad respiratoria viral que desde China se extendió a otros países asiáticos y a Canadá, que mata una de cada diez personas infectadas.
-          Síndrome Respiratorio del Medio Oriente (MERS) de la misma familia que el SARS identificado en el 2012 en Arabia Saudita donde murió el 35% de las personas infectadas.
-          Fiebre del Valle del Rift: virus que afecta al ganado vacuno, ovejas y cabras y al ser humano.
-          Zika: virus que lo transmite el mosquito, que puede producir microcefalia en niños nacidos de embarazadas infectadas y parálisis de Guillain Barré.
-          Fiebre de Lassa: la adquiere el ser humano al ponerse en contacto con orina y heces de roedores infectados y de persona a persona.
-          Enfermedad X: La OMS decidió incluir a la enigmática “Enfermedad X” en su lista potencial de brotes o epidemias que requiere atención especial. Se trata de un agente patógeno desconocido que podría causar una “epidemia internacional grave”. La enfermedad X representa lo desconocido hasta ahora, y los científicos de la OMS afirman, que debemos enfrentar el hecho inevitable de que siempre existe la posibilidad de que surja un nuevo virus potencialmente mortal en algún momento, en algún lugar del mundo.
A excepción de la gripe o influenza, no existen vacunas ni tratamiento específico contra estos virus. Sin embargo, cada país puede fortalecer su sistema de salud pública y hacer mayores inversiones en prevención ahora. Después, podría ser muy tarde.

Dr. Marcos Díaz Guillén
pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana.



miércoles, 29 de mayo de 2019

Leche materna y perfil lipídico


Perfil lipídico es el conjunto de pruebas que se hacen en el laboratorio para determinar el estado de las grasas o lípidos corporales.

Un estudio publicado en la Revista Cubana de Pediatría, Vol. 87, No. 2, abril-junio/2015, titulado “Duración de la lactancia materna exclusiva, estado nutricional y dislipidemia en pacientes pediátricos “concluyó, que el abandono precoz de la lactancia materna trae complicaciones a corto y largo plazo. Que los niños que abandonaron precozmente la lactancia materna exclusiva el 81% presentó malnutrición y el 74% aumento de los triglicéridos.

La OMS estima, que en un total de 94 países pobres la población menor de 1 año presenta una tasa de lactancia materna exclusiva en los primeros 4 meses de un 35%, mientras que en la R.D. solo el 4.7% de las madres amamantan. Un indicador de bajo nivel educacional y un subdesarrollo marcado en el contexto mundial actual.

El uso de fórmulas maternizadas tempranamente está justificado en condiciones muy especiales o cuando la madre se reintegra a su trabajo. Pero, negarle el seno materno a un bebé desde el momento mismo de su nacimiento, en un país pobre, para beneficiar a la industria y beneficiarse personalmente, debe ser considerado un crimen, cuando esa negación proviene de personas que están muy bien informadas.

Una investigación reciente reconfirma que la leche materna tiene más colesterol que la leche de fórmulas, y que los niños amamantados tienen un metabolismo y síntesis de colesterol a los 17 años diferente a aquellos que no se amamantaron. Estudiaron 3, 261 niños en una cohorte de niños chinos de Hong Kong, por sexo, peso al nacer, edad gestacional en semanas, paridad de la madre, características del embarazo, nivel educacional, edad y lugar de nacimiento de los padres.  Concluyendo: que la lactancia materna exclusiva en los primeros 3 meses de vida comparada con la alimentación artificial, se asoció a un colesterol bajo y a concentraciones bajas del colesterol malo en esos mismos niños a los 17 años. Evidenciando una vez más, que la lactancia materna exclusiva en los primeros meses promueve un perfil lipídico saludable con implicaciones beneficiosas cardiovasculares a lo largo de toda la vida.

REFERNCIA: “Breastfeeding in infancy and lipid profile in adolescense”. L.L. Hui et cols.
Pediatrics, may 2019, vol. 143/ISSUE 5.

Dr. Marcos Díaz Guillén
Pediatra-neonatólogo
Santo Domingo
República Dominicana

martes, 28 de mayo de 2019

Disruptores endocrinos: el niño y el polvo doméstico






En el polvo doméstico que respiramos hay sustancias químicas que actúan como disruptores endocrinos, es decir, que pueden alterar la función normal de las glándulas y sus hormonas en nuestro cuerpo, y los niños son los más perjudicados. “Estas sustancias químicas promueven el desarrollo de células de grasa y la obesidad en la edad pediátrica”. Christopher Kassotis y su grupo de investigadores de la escuela de medio ambiente de la Universidad de Duke, Durham, North Carolina, EE.UU. publicaron recientemente en la reunión anual de la Sociedad de Endocrinología de ese país, su investigación en la que vinculan a esos químicos presentes en el ambiente doméstico a la salud metabólica de los niños.

En esta investigación encontraron, que alrededor de 70 productos químicos tenían una relación muy significativa con el desarrollo de células grasa inducido por el polvo doméstico y, 40 químicos se relacionaron con el incremento de precursores de grasa y el sobre peso. En los adultos, esos químicos interfieren además con la función de la hormona tiroidea y su relación con un mayor índice de masa corporal; lo que sugiere que el medio ambiente casero puede jugar un rol importante en la salud humana muy particularmente en los niños, ya que la exposición temprana y a largo plazo en esta etapa del desarrollo puede ser potencialmente más disruptiva en ellos que en los adultos. “Constantemente hemos observado los efectos del polvo casero inhalado en concentraciones tan bajas como menos de 10 microgramos, y, en el caso de los niños, se estima que consumen entre 60 y 100 miligramos diarios, más de mil veces esa cantidad”.

  En conclusión, podemos decir, que tanto las investigaciones anteriores como las recientes evidencian que el polvo que se acumula en nuestros hogares contiene cantidades apreciables de químicos que son disruptores endocrinos que dañan nuestra salud, principalmente la de nuestros hijos. Que esas sustancias provienen de jabones y otros detergentes, pinturas y cosméticos. Que la industria fabricante debiera replantearse la elaboración esos productos y, que los padres procuremos que nuestros hijos pasen más tiempo al aire libre, en contacto con la naturaleza, disfrutando nuestra biodiversidad la que cada día deberíamos proteger más.

REFERENCIA: Disruptores Endocrinos, ENDO/2019/New Orleans.

Dr. Marcos Díaz Guillén
Pediatra-Neonatólogo
Santo Domingo
República

lunes, 27 de mayo de 2019

Evidencia Científica: los riesgos de ignorarla


Ignorar la evidencia científica puede resultar muy caro en términos económicos y de salud humana. Cuando los padres han dejado de vacunar a sus hijos influenciados por personas que sin evidencia científica relacionan las vacunas con enfermedades en los niños, es causa de que hayan reaparecido el sarampión, tosferina y otras enfermedades que estaban controladas o erradicadas.  Cuando se hace uso de productos naturales, alternativos o vitamínicos para “curar” enfermedades que ni siquiera la ciencia médica conoce sus causas, los resultados son desastrosos.

El pasado 11 de febrero/2019 la Administración de Alimentos y Drogas (FDA) de los EE.UU. tomó medidas contra 17 compañías de suplementos dietéticos por afirmar que pueden tratar la enfermedad de Alzheimer. La comunidad de la enfermedad de Alzheimer acogió con satisfacción dichos planes que “también deben ser aplicados y apoyados por los profesionales de la salud en todo el mundo”.

La FDA también, ha enviado advertencias a empresas que venden productos desde aceite de aguacate, vitaminas y extractos de hierbas que comercializan para la prevención del Alzheimer, el cáncer y otras enfermedades. Esa industria que es muy lucrativa, debería invertir en ensayos clínicos y aleatorios, en procesos de investigación que los hagan creíbles, haciendo lo que hacen los científicos e investigadores reconocidos a quienes les toma 10 a 15 años para que un producto sea aprobado para el consumo humano. Para citar solo al Ginkgo Biloba, los ensayos fase 3 bien diseñados y ejecutados no han demostrado ninguna eficacia para prevenir el deterioro cognitivo en las personas. Así también con otros productos “naturales” aplicados a dolencias humanas que la ciencia médica no ha podido curar. En este contexto, la revista científica “The Lancet Neurology” ha producido una sección que ha llamado “Quackery” o curanderismo en la que cubre las últimas noticias sobre prácticas ignorantes o fraudulentas.

 En muchas enfermedades crónicas, mentales y neurodegenerativas la medicina del siglo 21 todavía lo único que puede hacer es, aliviar y dar un tratamiento paliativo, recomendar cambios poco costosos en nuestro estilo de vida como el ejercicio físico, dieta saludable, el compromiso y la interacción social para mejorar nuestra salud y prevenir el deterioro cerebral. Mientras tanto, lo correcto es, no hacer caso de información carente de evidencia científica e  insistir en que se siga investigando.

REFERENCIA: “The risks of Ignoring Scientific Evidence”. The Lancet Neurology/february, 2019.

Dr. Marcos Díaz Guillén
Pediatra - Neonatólogo
Santo Domingo,
República Dominicana


lunes, 6 de mayo de 2019

Libros Electrónicos vs Libros Impresos


Investigaciones previas han documentado la poca interacción y dialogo entre padres e hijos cuando leen en formatos electrónicos. Esto es lógico que se dé en la relación entre padres y niños de más edad. Sin embargo, se desconocía si pasaba lo mismo cuando los padres hacen uso de la tecnología para leerles cuentos o historietas a sus hijos más pequeños.

En una investigación reciente publicada en “Pediatrics”, revista oficial de divulgación científica de la Academia Americana de Pediatría (AAP), se examinó la interacción verbal y no verbal entre padres y niños pequeños (1-3 años), cuando les leían libros electrónicos vs libros impresos. Estudiaron 37 parejas de padres y sus hijos quienes leyeron en 3 libros, uno electrónico básico, un libro electrónico avanzado con efectos de sonidos y videos, y, un libro impreso. Codificaron la verbalización e interacción de los padres con sus hijos en intervalos de cada 10 segundos en una escala de 1 a 5 (5 mejor puntuación) donde demostraron, que los padres dialogaron e interactuaron más con sus hijos cuando usaron libros impresos, y muy poco cuando lo hicieron con libros electrónicos.

La lectura impresa compartida promueve el desarrollo del lenguaje, la alfabetización del niño y los vínculos mutuos. Además, pasar páginas para atrás y hacia adelante, favorece y mejora las habilidades motoras finas del niño.  La investigación, dirigida por el Hospital C.S. Mott de la Universidad de Michigan encontró que padres y niños verbalizan e interactúan menos cuando se leen los libros electrónicos que cuando se hace con los libros impresos.  Se necesitan más estudios y más casuísticas que soporten la evidencia científica de que los libros impresos en relación con los electrónicos son una mejor ayuda para una mejor relación padres-hijos. Sin embargo, la AAP recomienda que se continúe leyendo los cuentos e historietas en formatos impresos particularmente cuando se trata de bebés y niños pequeños.

Dr. Marcos Díaz Guillén
Pediatra - Neonatólogo
Santo Domingo, República Dominicana


REFERENCIA: “Differences in Parent-Toddler Interactions with Electronic versus Print Books”.  Tiffany G. Munzer et cols. Pediatrics: April 2019, Volumme 143/ISSUE 4.