lunes, 22 de septiembre de 2025

RESISTENCIA BACTERIANA: LAS VACUNAS MÁS ALLÁ DE LOS ANTIBIÓTICOS

 

Los antibióticos son medicamentos que detienen el crecimiento o matan las bacterias que se encuentran dentro y fuera de nuestro cuerpo. Son muy eficaces para combatir infecciones bacterianas potencialmente mortales. Sin embargo, el excesivo e indiscriminado uso de los mismos, ha permitido que muchas bacterias se hayan vuelto resistentes a su acción. Un problema que se agrava y al que hay que poner atención, y que, en nuestro país, no ha habido voluntad oficial de atender. En la R. D. uno puede adquirir cualquier antibiótico sin prescripción médica siendo este, entre otros, el factor principal de un problema de salud pública que dificulta a los médicos curar infecciones que antes eran fácilmente tratables.

 

Recientemente, la Sociedad Dominicana de Infectología manifestó su preocupación ante los hallazgos del Instituto de Innovación en Biotecnología e Industria, universidades y otras Instituciones aliadas que, mediante análisis genómico avanzado detectaron la presencia de “Bacterias Resistentes” en ríos importantes de nuestro país: Ozama, Isabela, Yaque del Norte y Yaque del Sur. En este último, se identificaron bacterias como el Vibrio Cholerae, causante del cólera, y Salmonelas, capaces de producir infecciones intestinales graves y muertes. (Diario Salud. Por Viannelys Alcántara, septiembre 8, 2025).

 

 Sabemos y hay que reconocer que, las vacunas por su acción de prevención de enfermedades bacterianas y virales son la mejor herramienta para evitar muchas de las enfermedades a las que están expuestos los pueblos. Que cada día las vacunas salvan 5 vidas y que entre 3 y 3.5 millones de personas se salvan cada año por una vacunación oportuna. Y que, debido a la propaganda antivacuna con el secretario de Salud de los EE. UU. a la cabeza, solo este año en las Américas se han reportado 35 nuevos brotes y más de 10 mil casos de sarampión con sus secuelas de neumonía, encefalitis y muerte. Una enfermedad que por la vacunación estaba controlada en el mundo.

 

Los médicos dominicanos con mucho tiempo de ejercicio, particularmente los pediatras, recordamos la gran cantidad de niños en las Emergencias y en las salas de nuestros hospitales con: meningitis, encefalitis, difteria, tosferina, epiglotitis, tétanos, neumonías, otitis media y muchas otras enfermedades que antes de la ampliación del programa de vacunación sufrían esas infecciones y sus secuelas. Gracias a la vacunación dramas de esa magnitud ya no se ven y de paso, se ha contribuido al control de la resistencia bacteriana. Porque vacunando oportunamente, evitamos muchas infecciones haciéndosose innecesario el uso de antibióticos. Lo otro es desinformación sin sustentación ni evidencia médica.

Marcos Díaz Guillén

Pediatra de la República Dominicana.   

 

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 14 de septiembre de 2025

MÉDICOS SIN JUICIO CLÍNICO: LA TRAMPA OCULTA DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

 

En 1943 Warren Mcculloch y Walter Pitts presentaron por primera vez un modelo de neuronas artificiales, acontecimiento que dio origen a lo que hoy conocemos como Inteligencia Artificial (I.A.). Es a partir de la década de 1970 que la I.A. se introduce en la medicina con nuevos y avanzados sistemas computacionales.

 

Reconocemos que, es una herramienta casi imprescindible en la formación de todo tipo de profesionales. Uno de los grandes avances de la ciencia, la tecnología y la innovación, y que, si en la formación de nuestros médicos hacemos un mal uso de ella, se corre el riesgo de graduar profesionales con un pobre humanismo y juicio clínico.

 

La interacción entre humanos y computadoras viene de muchas décadas atrás y los recientes avances aplicados a la ciencia de la medicina, han dado lugar a interacciones más efectivas y potencialmente más peligrosas.

 

“La aparición de los “Grandes Modelos de Lenguaje” parecen tener connotaciones que debemos conocer muy bien. Estos modelos, pueden simular generación de conocimiento y razonamiento clínico con una fluidez similar a la humana lo que le da la apariencia de procesamiento independiente de la información”. Por lo tanto, la I.A. puede transformar el aprendizaje y la práctica médica y como resultado, profesionales altamente capacitados, pero incapaces de resolver problemas de manera independiente al compararlos con profesionales formados antes de la aparición de esta interesante herramienta.

 

La I. A. puede usarse para la descarga cognitiva y el estudiante depender de ella para reducir su carga de trabajo. Una estrategia que facilita su participación mental en tareas más exigentes, pero la descarga de tareas complejas como el razonamiento clínico y las tomas de decisiones pueden conducir a la automatización y a la pérdida de habilidades previamente adquiridas. Por otra parte, a medida que la I.A. se expande en las aulas, los educadores en las escuelas de medicina se ven obligados a supervisar el uso de una tecnología en la que los alumnos pudieran ser más hábiles que sus profesores.

 

Los docentes, deberían aprovechar momentos programados de reflexión con sus alumnos e invitar a la indagación compartida sobre las capacidades y limitaciones de la I.A. lo que puede sentar las bases para momentos educativos que promuevan el pensamiento clínico y una alfabetización en I. A. para todos.

 

 Concebir la I.A. como un sustituto del razonamiento y el juicio clínico del médico es un grave error, porque su rol debería ser, una ayuda para una mejor formación.

 

REFERENCIA: Educational Strategies for Clinical Supervision of A. I. Use. August 20, 2025.

DOI: 10.1056/NEJMra2503232 VOL. 393 No. 8

 Marcos Díaz Guillén

pediatra de la República Dominicana.

 

 

 

 

 

 

 

 

jueves, 11 de septiembre de 2025

REGALEMOS TIEMPO Y RECUERDOS: LO QUE REALMENTE NECESITAN NUESTROS NIÑOS

 

Se inicia un nuevo ciclo escolar y finalizadas las vacaciones de verano cientos de miles de niños, ricos y pobres, de escuelas públicas y colegios privados ya se han reintegrado a las aulas. Unos tuvieron la oportunidad de asistir a algún campamento dentro o fuera del país, y otros, ir al pueblo de donde son sus padres y compartir con sus primos, tíos y abuelos.

 

Pero ¿Qué es lo que realmente quedará en sus memorias? El tiempo y las experiencias que les pudimos regalar, las que recordarán hasta dejar de ser niños, para convertirse en adultos felices. Regalos, que, además, deberían ser experiencias cotidianas.

 

Claire Lerner, experta en desarrollo infantil sugiere que cuando los niños tienen demasiado cosas materiales y satisfechas sus necesidades más allá de los límites necesarios, su capacidad de jugar disminuye y que, cuando posee pocas de esas cosas, se promueve más en ellos el intercambio y la cooperación. Y yo diría, que, si el tiempo del niño fuera de las aulas lo utilizamos para alejarlo de nosotros; y no lo aprovechamos para ofrecerle nuevas experiencias, podría ser un tiempo perdido. Porque lo que más satisface al niño, lo hace crecer y madurar, es el tiempo y las experiencias compartidas.

 

En los hogares donde faltan esas vivencias esenciales que solo nos cuestan algo de nuestro tiempo, poco importa que seamos pobres, clase media o ricos, el resultado final será el mismo: un ser humano infeliz. Porque lo que satisface y llena al niño y a toda persona nace de la interacción, la creatividad y la conexión emocional.

 

Por lo tanto, regalemos no solo lo que nos cuesta dinero, que no está mal. Regalemos a nuestros hijos también, una tarde en el mirador, caminar juntos, compartir un helado o echar al viento una chichigua. Y entonces, estaremos dando mucho más de lo que creemos. Cada helado compartido, cada caminata, cada historia contada, fortalece la autoestima, la seguridad emocional y los vínculos interpersonales. Y nada de eso se envuelve en papel de regalo. Sin embargo, quedará grabado en la memoria de nuestros niños y les servirá para siempre, porque serán mejores personas.  

 

Ojalá que nuestros niños hayan podido disfrutar sus vacaciones de verano con muchas y distintas actividades compartidas. Y que, de nuevo en las aulas, encuentren a los maestros y autoridades que les puedan ofrecer una buena formación académica y puedan regalarles valores y experiencias de vida digna, eso nunca lo habrán de olvidar. Y tendremos un mejor país.

Marcos Díaz guillén

Pediatra de la República Dominicana.